Los rumores sobre un remake de Assassin’s Creed 4: Black Flag vuelven a sonar con fuerza, pero las filtraciones están generando dudas entre los amantes de esta saga, especialmente sobre el rumbo del juego y de la franquicia en general.
La trama moderna de Assassin’s Creed siempre ha sido motivo de división. En los primeros juegos, se consideraba el punto más débil de la saga, lo que llevó a su desaparición en entregas posteriores. Sin embargo, a medida que esta narrativa moderna perdió cohesión, los fans han debatido mucho sobre qué pierde la serie sin ella. Según los rumores, el remake de Black Flag eliminará por completo los segmentos modernos presentes en la versión original.
Filtraciones sobre Assassin’s Creed 4: Black Flag
Según la fuente Jeauxvideo, el juego se lanzará en 2026 sin las secciones modernas del original. Black Flag fue el primer título tras la historia de Desmond, con un protagonista silencioso en segmentos en primera persona que trabajaba en una versión ficticia de Ubisoft impulsada por Abstergo. Aunque no era la parte más querida, algunos fans se preguntan cómo encajará la trama principal sin estos detalles clave.
Las filtraciones también indican que el personaje de Mary Read tendrá nuevo material narrativo. Asimismo, los sistemas de combate y equipo se renovarán para alinearse con las entregas modernas.
¿Qué ha pasado con la trama moderna?
La narrativa moderna dio un giro con el reinicio suave de la saga en Assassin’s Creed: Origins (2017), introduciendo un nuevo protagonista que marcó el comienzo de una nueva historia. Esta trama se cerró en gran medida con los DLC de Assassin’s Creed: Valhalla.
Ubisoft ha respondido a las preguntas sobre el carácter abierto de estas historias asegurando que no han abandonado la narrativa moderna. Aunque en Assassin’s Creed: Shadows (el segundo juego más vendido en EE. UU. este año) decidieron restarle protagonismo.
¿Se acabará Assassin’s Creed?
La narrativa moderna podría estar desapareciendo porque limitaba el futuro de la saga. La historia de Desmond en los primeros Assassin’s Creed parecía avanzar hacia revelaciones, un gran conflicto y un final.
Sin embargo, con Assassin’s Creed 3, los planes cambiaron: la historia se cerró, pero también se abrió una nueva con la liberación de Juno, una villana sobrenaturalmente poderosa con intenciones de dominar el mundo. Estos cambios constantes sugieren que ya no hay un plan narrativo a largo plazo y que la saga podría continuar simplemente mientras siga siendo rentable.
